domingo, 7 de enero de 2018

Se tiñen de rojo...

No existe la luz en sus ojos,  no existe nada dentro de ellos.
Aplauden pero no ven nada, solo el hastío y la redundancia. Se tiñen de rojo aplaudiendo a lo desconocido,  se tiñen de rojo y se acuestan en la pobreza mental, se acercan a todos y entre todos están muertos.  Se hace una red de muerte comiendo el cerebro de otros.  Se comen entre ellos,  entre ellas,  entre ambos. Tomándose en brazos y entre sedas de sábanas rotas, tocando sus piernas adorando al vacío entre besos y pieles ajenas.
Perdidos como se pierden la voluntad,  como se pierden las horas y los sueños al despertar.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

El beso

 Creo que los besos se dan en la boca  Porque es de donde brotan las palabras  Si yo te besara las puntas de los dedos  Estaría buscando una...